Un informe de los CDC encuentra que ningún estado ha cumplido con las metas federales de consumo.
JUEVES, 9 de septiembre (HealthDay News/HolaDoctor) — En 2000, el gobierno de EE. UU. fijó unas modestas metas sobre la cantidad de frutas y verduras que las personas debían consumir, pero una década después, la mayoría de los estadounidenses no está ni cerca de alcanzar dichos objetivos, afirmaron el jueves las autoridades de salud.
De hecho, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU., en 2009, 67.5 por ciento de los adultos comía fruta menos de dos veces al día, y 73.7 por ciento comía verduras menos de tres veces al día. Las metas de Healthy People 2010 eran que 75 por ciento de las personas comieran al menos dos porciones de fruta y que 50 por ciento comieran al menos tres porciones de verduras todos los días.
«Durante la última década, hemos estudiado la intervención conductual, como la consejería, para lograr que la gente incluya frutas y verduras», señaló la Dra. Jennifer Foltz, coautora del informe, e investigadora del Centro Nacional para la Prevención de Enfermedades Crónicas y la Promoción de la Salud de los CDC. «Pero no es tan fácil».
«En la próxima década, trabajaremos en lograr que las opciones sanas sean las fáciles», comentó.
Nuevos programas conllevan la promoción de la jardinería y los mercados de granjeros, y llevar más frutas y verduras a las escuelas y lugares de trabajo, apuntó Foltz.
Además, Foltz dijo que podría haber programas para ayudar a los minoristas a mejorar la disponibilidad de frutas y verduras a través de incentivos como excepciones fiscales, lo que también lograría que las personas de bajos ingresos puedan costear las frutas y verduras.
Foltz señaló que los estadounidenses de bajos ingresos son más propensos a no tener acceso a frutas y verduras frescas a precios asequibles, motivo de que se necesiten programas dirigidos específicamente a esa población.
El informe aparece en la edición del 10 de septiembre de la revista de los CDC, Morbidity and Mortality Weekly Report.
A pesar de los esfuerzos por fomentar la alimentación sana, en la última década ha habido una reducción de dos por ciento en el consumo de fruta, y no ha habido cambios en el consumo de verduras, encontraron los investigadores.
Foltz lamentó que todavía ningún estado ha cumplido con las metas de Healthy People 2010. De hecho, apenas un estado, Idaho, aumentó la cantidad de frutas y verduras consumidas, mientras que en diez estados se observó una disminución en el consumo de frutas y verduras.
Los diez estados donde se observaron reducciones significativas en el consumo de frutas y verduras son Arizona, Kansas, Maryland, Carolina del Norte, Oklahoma, Rhode Island, Carolina del Sur, Dakota del Sur, Tennessee y Virginia Occidental, según el informe.
Una dieta rica en frutas y verduras es parte importante de mantener el peso bajo control y reducir el riesgo de enfermedad cardiaca, algunos cánceres, accidente cerebrovascular, enfermedades respiratorias inferiores crónicas y diabetes, señalan los autores.
Connie Diekman, directora de nutrición universitaria de la Universidad de Washington en St. Louis, dijo que «como dietista registrada, escucho tres motivos por los cuales cumplir con la ingesta recomendada es tan difícil».
Éstos incluyen la asequibilidad de productos frescos y el no reconocer los valores nutricionales de las frutas y verduras congeladas o enlatadas. Además, está el tiempo que conlleva la preparación de las verduras frescas y la inconveniencia de llevar frutas o verduras para esas comidas y refrigerios necesarios, apuntó.
«Otro factor que parece impactar la compra de productos frescos que no está claro en el informe es su costo», señaló Diekman. «Con los cambios económicos de los últimos años, las pequeñas diferencias en consumo según el ingreso familiar podría ser un importante factor que los proveedores de atención de salud deben abordar».
Otra experta, Samantha Heller, dietista, nutricionista, fisióloga del ejercicio y coordinadora de nutrición clínica del Centro de Atención del Cáncer del Hospital Griffin en Derby, Connecticut, apuntó «que las frutas y verduras son buenas para nosotros es conocimiento común».
Desafortunadamente, parece que los alimentos menos sanos reemplazan a las verduras y frutas en las dietas de la mayoría de estadounidenses, lamentó.
«Llenarse de comida rápida, comida basura, dulce y bebidas endulzadas con azúcar es fácil. Además, al comer estos alimentos tan sabrosos, que son ricos en grasa, azúcar y sodio, alteramos nuestro gusto y expectativas mentales sobre el sabor que se ‘supone’ que la comida tenga», explicó Heller.
«Terminamos deseando esos alimentos, e ignorando la comida más sana. Por ejemplo, un melocotón maduro y dulce no sabe tan dulce a alguien que se acaba de beber un refresco de 20 onzas o de comerse un bol de helado. Lo mismo pasa con las verduras. El delicioso sabor de muchas verduras palidece en comparación con las hamburguesas con queso y las papas fritas llenas de grasa y sodio», advirtió.
Algunas formas sencillas de añadir más frutas y verduras al día incluyen añadir bayas al cereal o yogurt, echar verduras congeladas a la sopa, y añadir zanahorias, brócoli y hongos a la salsa para la pasta, sugirió Heller.
Artículo por HealthDay, traducido por Hispanicare
FUENTES: Jennifer Foltz, M.D., researcher, National Center for Chronic Disease Prevention and Health Promotion, U.S. Centers for Disease Control and Prevention; Samantha Heller, M.S., R.D., dietitian, nutritionist, exercise physiologist and clinical nutrition coordinator, Center for Cancer Care, Griffin Hospital, Derby, Conn.; Connie Diekman, M.Ed, RD, director, university nutrition, Washington University, St. Louis; Sept. 10, 2010, Morbidity and Mortality Weekly Report