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Una manzana al día podría resultar realmente saludable

Asocian las frutas y verduras de carne blanca con una reducción en el riesgo de accidente cerebrovascular, según un estudio.

Las frutas y verduras cuyas porciones comestibles son blancas podrían reducir el riesgo de accidente cerebrovascular (ACV) más que otras, informan investigadores holandeses.

Cada 25 gramos al día de frutas y verduras blancas consumidas conllevaron una reducción de 9 por ciento en el riesgo de ACV, y las manzanas y peras fueron las «frutas blancas» más comúnmente consumidas, según el estudio, que aparece en la edición de noviembre de la revista Stroke.

«Las frutas y verduras verdes, naranjas/amarillas y rojas/moradas no se relacionaron con el ACV. Sin embargo, el riesgo de incidencia de ACV fue 52 por ciento más bajo para las personas con una alta ingesta de frutas y verduras blancas, en comparación con las personas que tenían una ingesta baja», señaló la autora del estudio Linda M. Oude Greip, becaria postdoctoral de la Universidad de Wageningen en los Países Bajos.

Pero Oude Greip anotó que los hallazgos no significan que se pueda dejar de comer otras frutas y verduras. Anotó que primero hay que replicar estos hallazgos. E incluso si investigaciones futuras confirman estos hallazgos, «dado que las frutas y verduras de otros colores podrían proteger de otras enfermedades crónicas, comer muchas frutas y verduras sigue siendo importante», enfatizó.

Oude Greip dijo que investigaciones anteriores han mostrado que un consumo más alto de frutas y verduras puede reducir el riesgo de ACV, pero ninguna investigación había observado frutas y verduras específicas para ver si alguna contribuía más a la reducción en el riesgo que otras.

Para el estudio, Oude Greip usó datos recolectados por el Instituto Nacional de Salud Pública y el Ambiente de los Países Bajos, que incluían a más de 20,000 personas. Los participantes del estudio tenían entre 20 y 65 años de edad al inicio del mismo, y ninguno mostraba señales de enfermedad cardiovascular.

Todos los voluntarios del estudio completaron un cuestionario de frecuencia alimentaria de 178 ítems. El estudio también incluyó diez años de información de seguimiento sobre la salud de los participantes. Durante el periodo de seguimiento, 233 personas sufrieron un ACV.

Las frutas y verduras se dividieron en cuatro grupos de color, cada uno basado en el color de la carne de las frutas y verduras: verdes, naranjas/amarillas, rojas/moradas y blancas.

El único grupo que se asoció con una reducción estadísticamente significativa en el riesgo de ACV fueron las frutas y verduras blancas.

Las frutas y verduras incluidas en la categoría blanca fueron las manzanas, las peras, el jugo de manzana, la salsa de manzana, los plátanos, la coliflor, la achicoria, los pepinos y los hongos. Las frutas y verduras blancas fueron el producto más comúnmente consumido. El 36 por ciento de la ingesta de frutas y verduras era en el grupo blanco. En el grupo blanco, las manzanas y peras fueron las más comúnmente consumidas, dando cuenta de 55 por ciento del consumo.

Por cada incremento de 25 gramos en la cantidad de frutas blancas consumidas cada día, el riesgo de ACV se redujo en nueve por ciento, según el estudio. Una manzana promedio tiene 120 gramos, añadieron los investigadores.

Oude Greip dijo que no está claro exactamente qué componentes de las frutas blancas podrían proteger del ACV, pero sospecha que la fibra dietética y los flavonoides tienen algo que ver. Las manzanas y peras son ricas en un flavonoide llamado quercetina.

Jessica Shapiro, dietista asociada de bienestar del Centro Médico Montefiore en la ciudad de Nueva York afirmó que «manzanas y peras son frutas muy buenas. Están disponibles todo el año, y casi siempre son buenas».

«Igual que en todo estudio, hay limitaciones. Una de ellas es que la ingesta alimentaria fue autorreportada. Los cuestionarios de frecuencia alimentaria conllevan un sesgo inherente porque es difícil recordar exactamente lo que se ha comido antes. Pero el mensaje positivo de esto es que todo lo que hemos dicho se ve confirmado de nuevo. Las frutas y verduras son buenas», enfatizó.

Shapiro también dijo que sería difícil aislar el componente de las frutas blancas que podría reducir el riesgo de ACV. «En realidad es el alimento completo. Contiene fibra, fitoquímicos y flavonoides, y todos funcionan juntos de forma sinérgica. No creo que se trate de un solo nutriente».

Apuntó que no recomendaría limitar la dieta a frutas y verduras blancas. «Coma frutas y verduras de todo el arcoíris», añadió. «Cada fruta y cada verdura provee ciertos nutrientes que se combinan e interactúan entre sí».

Artículo por HealthDay, traducido por Hispanicare
FUENTES: Linda M. Oude Greip, M.Sc., postdoctoral fellow, Wageningen University, Wageningen, the Netherlands; Jessica Shapiro, M.S., R.D., C.D.N., associate wellness dietitian, Montefiore Medical Center, New York City; November 2011, Stroke

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