La mayoría son demasiado dulces y se anuncian para bebés que estarían mejor con la leche materna, afirman los expertos
Los alimentos para bebés comerciales no cumplen con las necesidades dietéticas de los bebés durante el destete, según un estudio nuevo.
Eso es así porque los alimentos comerciales son predominantemente dulces que proporcionan pocos beneficios nutricionales adicionales con respecto a la leche matera o de fórmula, afirmaron los investigadores. También señalaron que los alimentos comerciales para bebés se venden para el consumo de los bebés a partir de 4 meses de edad, una edad en la que deberían seguir tomando solo leche materna.
«Los alimentos comerciales considerados en este estudio que se consumían más habitualmente no proporcionaban más energía que la leche materna o de fórmula, y sin embargo se anuncian para una edad en la que reemplazarán a la leche materna o de fórmula, que es lo que todos los bebés menores de 6 meses realmente necesitan», explicó un equipo liderado por la Dra. Charlotte Wright, de la Universidad de Glasgow, en Escocia.
Un experto de EE. UU. dijo que el estudio plantea algunos problemas importantes.
«Pasar al destete desde unas dietas basadas en la leche a dietas basadas en alimentos a esta edad no debería tomarse a la ligera», afirmó el Dr. Peter Richel, jefe del departamento de pediatría del Hospital de Northern Westchester en Mount Kisco, Nueva York. «Debemos proporcionar la alimentación adecuada para proporcionar energía, una velocidad de crecimiento consistente y todo lo que sea fundamental y apropiado para cada edad en todas las áreas del desarrollo», afirmó.
En el nuevo estudio, el equipo de Wright analizó el contenido nutricional de todos los alimentos para bebés en el Reino Unido que se pueden consumir durante el destete, un momento en que se empieza a dar a los bebés alimentos con una mayor variedad de texturas y sabores para animarles a que prueben alimentos distintos y para fomentar su ingesta de energía y nutrientes.
Los 462 productos incluían alimentos preparados blandos y húmedos; comidas en polvo que se hidratan con leche o agua; cereales para el desayuno, y alimentos en trocitos, como los bizcochos tostados.
Los investigadores hallaron que el 79 por ciento de los productos eran alimentos preparados para comer con cuchara, el 44 por ciento de los cuales se vendían para bebés de 4 meses y mayores.
El contenido energético de los alimentos que se comen con cuchara era casi idéntico al de la leche materna y su contenido de proteínas era solo el 40 por ciento más alto que el de la leche de fórmula, según el estudio, que fue publicado en línea en la revista Archives of Disease in Childhood.
Los productos con carne eran los que más hierro contenían, pero no había más que en la leche de fórmula y no mucho más que en los productos que no tenían carne. Los alimentos en trocitos secos tenían niveles mucho más altos de energía y nutrientes en general, pero también tenían unos niveles de azúcar particularmente altos.
En general, casi dos tercios de los productos eran dulces. El equipo señaló que alimentarse de forma repetida con alimentos dulces durante la infancia puede hacer que los niños desarrollen una preferencia por ese tipo de alimentos.
La idea principal de los alimentos durante el destete es aumentar el contenido energético de la dieta y proporcionar fuentes más ricas de nutrientes, como el hierro, afirmó el equipo de Wright.
«Aunque es comprensible que los padres puedan elegir [estos productos] al principio del proceso del destete, los profesionales de la salud deberían ser conscientes de que tales alimentos no añadirán nada a la densidad de nutrientes de la dieta con leche», afirmó.
Y aunque el estudio se centró en los productos vendidos en el Reino Unido, afirmó Richel, los bebés estadounidenses probablemente se enfrenten a los mismos problemas nutricionales.
«Los alimentos que se ofertan para bebés [en Estados Unidos] son demasiado dulces en general», afirmó. «Los padres deberían ser conscientes de los alimentos procesados, los edulcorantes artificiales en los yogures de frutas y en los «aptos para bebés» y en los yogures líquidos. Estos productos parecen muy agradables y sencillos, con un gran marketing, un gran envase y grandes ventajas».
Sin embargo, los mejores alimentos para bebés podrían ser los preparados en casa. «Al tomar los primeros alimentos sólidos al inicio de la infancia, sería maravilloso si los padres tuvieran tiempo para preparar los alimentos en la cocina de casa», afirmó Richel. «Por ejemplo, para las frutas y las verduras, uno simplemente las escalda, las mezcla con un poco de líquido (leche materna, fórmula o agua) y ya está. Así se hace un puré. Las raciones pueden almacenarse en moldes de hielo para tener un acceso fácil».
Aunque hacerlo en casa pueda ser un poco menos práctico, «el resultado final valdrá mucho la pena», añadió. «¿Qué podría ser más importante que la salud de sus hijos?».
Artículo por HealthDay, traducido por Hispanicare
FUENTES: Peter Richel, M.D., chief, department of pediatrics, Northern Westchester Hospital, Mount Kisco, N.Y.; Archives of Disease in Childhood, news release, Sept. 9, 2013