Los beneficios del baile para la salud basados en evidencia científica son numerosos y profundos.
¡No se necesitas ser un profesional! Bailar puede ser una liberación profunda del estrés y la preocupación y al mismo tiempo es un excelente ejercicio.
Si no eres bailarín, o ha pasado mucho tiempo desde la última vez que bailaste, enterarte y aprender sobre los increíbles beneficios del baile para la salud puede ser la inspiración que necesitas para volver a la pista de baile.
Baila para mantenerte joven
A medida que envejecemos, experimentamos un mayor riesgo de deterioro cognitivo evidenciado por la aparición de enfermedades como la demencia y el Alzheimer en poblaciones de edad avanzada. No sorprende que las personas mayores experimenten marcadas mejoras gracias a la danza. El baile combina una gran cantidad de beneficios en una sola actividad: eleva del estado y aumenta la interacción social, junto con mejoras en la función cerebral y la calidad de vida.
Un estudio reciente publicado en Frontiers in Human Neuroscience ha demostrado que, si bien la mayoría de las formas de ejercicio ralentizan el deterioro relacionado con la edad, el baile tiene beneficios aún más profundos.
Se demostraron aumentos en el hipocampo, la región del cerebro responsable de la memoria, el aprendizaje y el equilibrio, y la más afectada por el deterioro relacionado con la edad. Los investigadores atribuyeron a los aspectos desafiantes como aprender nuevos bailes cada semana, es decir un estado de aprendizaje continuo, dominar nuevos ritmos, pasos y formaciones, combinado con una mayor participación social, impulsó la actividad cerebral, lo que generó beneficios cognitivos adicionales para el grupo de danza. Los investigadores se sintieron muy alentados por los resultados y calificaron el baile como «una herramienta poderosa para plantear nuevos desafíos al cuerpo y la mente, especialmente en la vejez». Se está planificando un nuevo estudio para aportar el poder combinado de la música y el movimiento en ayuda de los pacientes con demencia.
Baila para mantenerte en forma
Otro estudio demuestra que el baile puede mejorar la calidad de vida de pacientes con insufuciencia cardíaca y concluye que la danza terapia podría ser parte de la terapia de rehabilitación cardíaca.
¿Qué pasa si no tienes pareja de baile y dudas en ir a bailar solo? Gracias a su creciente popularidad, hay más opciones que nunca para encontrar una clase dirigida por un instructor que te atraiga. Ahora hay escuelas que ofrecen clases en una variedad de estilos de baile, como ballet con barra, donde los participantes se concentran en la flexibilidad y el desarrollo de la fuerza utilizando las herramientas clásicas del ballet o las clases de baile de hip-hop ofrecen una forma más libre de moverse.
Baila para ser feliz
Bailar es una forma natural de estimular las hormonas del bienestar en el cerebro y manetener alejada la depresión. Quizás nada pueda tener un impacto más profundo en los sentimientos de bienestar y satisfacción que conectarse genuinamente con otros seres humanos, y unirse a través del canto y la danza es una de nuestras tradiciones humanas más antiguas. Bailar con alguien ilumina áreas del cerebro que estimulan una sensación de unidad y conexión, algo que los científicos llaman «fusión entre yo y otro» según la publicación del Grupo de Investigación en Neurociencia Social y Evolutiva, Departamento de Psicología Experimental, Universidad de Oxford, Oxford del Reino Unido, que puede leer
aquí.
Otra
investigación publicada en 2009, encontró que los jóvenes que participaban en terapia de movimiento de danza reportaron significativamente menos angustia psicológica y demostraron mejores respuestas emocionales. Los niveles de neurohormonas se midieron antes y después de 12 semanas de terapia de baile, lo que agrega más evidencia que respalda estos hallazgos. La concentración de serotonina aumentó al bailar y los niveles de dopamina disminuyeron, lo que sugiere que la terapia de baile puede estabilizar el sistema nervioso simpático. Los investigadores concluyeron que bailar puede «modular beneficiosamente» estas importantes sustancias químicas cerebrales y mejorar la salud emocional en quienes padecen depresión.
En personas con cáncer
El baile puede proporcionar un impulso emocional cuando se experimentan otras dificultades en la vida, como un diagnóstico de cáncer. En 2005 se llevó a cabo un estudio de investigación piloto en dos centros de tratamiento del cáncer, explorando los efectos de la terapia de movimiento de danza en sobrevivientes de cáncer de mama en sus primeros cinco años después del tratamiento. Los resultados se basaron en mediciones de la calidad de vida, la amplitud de movimiento del hombro y la escala de imagen corporal. En comparación con el grupo no activo, el grupo de movimiento de danza mostró mejoras significativas en la calidad de vida. El rango de movimiento de los hombros también mejoró, al igual que la percepción de la imagen corporal. Los investigadores afirmaron que «el efecto general del entrenamiento de danza fue significativo» y se justifica que estudios más amplios incluyan la danza como parte de la atención continua a los sobrevivientes de cáncer.
Para personas con discapacidad auditiva
Un estudio de 2002 buscó comprender cómo la danza y otras formas de “educación estética” podrían influir en la socialización de las personas sordas. Los instructores de danza terapéutica aplicaron “coreoterapia” a jóvenes sordos durante un período de uno a tres años, y se registraron una variedad de métricas de socialización. Los investigadores descubrieron que los estudiantes “participaban con placer” y cuanto más bailaban (en términos de años), mejores eran sus habilidades sociales. Las motivaciones para su participación voluntaria variaron desde el deseo de mejorar la salud (10% citado), pasando por las oportunidades de relacionarse con los instructores (20%), hasta el puro amor por la danza (70%). Las mejoras en las habilidades sociales incluyeron el desarrollo de una perspectiva más madura, mejores calificaciones en la escuela y mejores habilidades de conversación. Los estudiantes se relajaron y se volvieron menos cohibidos, desarrollaron mejores habilidades para tomar decisiones y experimentaron más alegría. Y si se piensa que bailar es sólo para atrevidos, entre estos adolescentes sordos, sólo el 5% se sintió cansado y desanimado por las actividades.
Si estás aburrido de tu rutina habitual de ejercicios, de lidiar con circunstancias que te hacen sentir deprimido o simplemente quieres aumentar la alegría de tu vida, bailar es una actividad increíble, repleta de beneficios para la mente, el cuerpo y el alma.