Los alimentos y bebidas etiquetados como «bajo en grasa» y «diet» no solo no lo ayudan a perder peso, si no que en realidad hacen lo contrario. Estos productos contienen edulcorantes artificiales que en realidad causan acumulación de grasa y aumento de peso no deseado. Estos efectos secundarios son especialmente pronunciados en personas que ya son obesas.
Estos edulcorantes artificiales sobreestimulan e interrumpen los procesos metabólicos en el cuerpo, haciéndolos disfuncionales, según un estudio presentado en la reunión anual de la Sociedad de Endocrinología 2017 celebrada en Orlando, Florida. Los productos endulzados artificialmente también se han encontrado adictivos.
Los investigadores analizaron el efecto de la sucralosa, un edulcorante artificial, sobre las células madre recolectadas del tejido adiposo humano. Estas células se pueden transformar en células grasas, células musculares, cartílagos o huesos, dependiendo de su entorno. Ponen las células madre en placas de Petri con una dosis de sucralosa de concentración similar a la que se encuentra en la sangre de las personas que consumen muchos alimentos y bebidas endulzados artificialmente, o alrededor de cuatro latas de refresco dietético todos los días. Doce días después de la administración de sucralosa, los investigadores descubrieron que había una mayor expresión de genes que indicaban inflamación y producción.
Los investigadores llevaron a cabo una investigación de muestras de biopsias de grasa abdominal de cuatro sujetos obesos y cuatro sujetos sanos que regularmente consumían edulcorantes bajos en calorías. A través de este análisis, los investigadores encontraron que estos sujetos habían aumentado la expresión de genes productores de grasa. Los sujetos también exhibieron un mayor transporte de azúcar a sus células en comparación con las biopsias de sujetos que no consumen edulcorantes artificiales.
Además, dado que muchos edulcorantes artificiales son mucho más dulces que el azúcar real, estos productos químicos aumentan la expresión de los receptores del gusto, lo que provoca un alto nivel de azúcar en la sangre. En el estudio, aquellos que consumen edulcorantes artificiales tuvieron su expresión de los receptores del gusto aumentar hasta 2,5 veces. Además de promover el almacenamiento de grasa, el edulcorante artificial Aspartame representa el 75 por ciento de todas las reacciones alimentarias negativas, como dolores de cabeza, mareos, pérdida de la visión, pérdida de memoria, convulsiones, fatiga, cáncer y muerte súbita.
Otros edulcorantes artificiales de los que debe ser consciente
A continuación se enumeran los edulcorantes artificiales que debe evitar y en qué alimentos se pueden encontrar:
Acesulfame de potasio: se encuentra en refrescos, gelatinas, goma de mascar y postres helados, este edulcorante artificial se ha relacionado con el cáncer. El acesulfame potásico se vende en el mercado con los nombres Sunett y Sweet One.
Jarabe de maíz de alta fructosa: este edulcorante químico contiene 17 calorías por cucharadita y se ha descubierto que contribuye a la obesidad más que a la sacarosa. Se puede encontrar en cereales, postres y refrescos.
Neotame: el Neotame es aproximadamente de 7,000 a 13,000 veces más dulce que el azúcar de mesa y está hecho por la misma compañía que produce aspartame. Se puede encontrar en algunas bebidas, productos lácteos, postres congelados, pudines y jugos de frutas.
Sacarina: también conocida como Sweet’N Low, la sacarina no contiene calorías, pero se ha relacionado con el cáncer de vejiga. Se puede encontrar en bebidas, productos enlatados y dulces.
Consume buenos azúcares en lugar de edulcorantes artificiales
Si realmente anhelas algo dulce, al mismo tiempo, tratando de perder peso, opta por alimentos naturalmente dulces. Aquí hay algunas alternativas:
Frutas: las frutas contienen fructosa rica en fibra, vitaminas y minerales, lo que las convierte en la fuente de azúcar más saludable. Puede comerlos como refrigerios o usarlos para agregar dulzura a sus platos.
Néctar de Agave – El néctar de Agave se obtiene del cactus de agave. Aunque su sabor y textura son similares a la miel, no contiene tantos antioxidantes como la miel. Es más dulce que el azúcar y es poco probable que cause picos de azúcar en la sangre.
Fuente:
https://www.naturalnews.com/2018-07-21-do-you-really-want-to-use-that-artificial-sweeteners-linked-to-unwanted-weight-gain.html
