“Esta vacuna es un auténtico fraude. Están experimentando con nuestros hijos”, afirma un catedrático de salud pública española
Érika tiene 16 años y vive en Alicante. En el colegio le midieron 144 de cociente intelectual. Superdotada. Devoradora de libros y películas. Un crack de las matemáticas. Promesa de la gimnasia rítmica, del taekwondo. Esta era Érika hasta los 14 años… hasta que le pusieron la vacuna…
La trágica historia que marcará su vida para siempre comenzó tras ponerse la vacuna del papiloma humano (VPH). Antes de la vacunación era una niña sana, deportista y magnífica estudiante y, tras la vacuna, ha quedado postrada en una silla de ruedas con todos sus sueños rotos. Este no es un caso aislado, se están produciendo innumberables casos en todo el mundo de niñas que sufren Síncopes, lupus, desmayos, convulsiones, epilepsia…, incluso fallecimientos tras vacunarse.
Al día siguiente de recibir la primera dosis, el 10 de octubre de 2013, Érika sufrió una crisis de migraña que la mantuvo encamada y a oscuras. No pudo ir a clases hasta final de curso. “No podía soportar los sonidos ni la luz, sentía mucho dolor en el abdomen, cansancio, la cabeza le estallaba…“, recuerda su madre. A pesar de ser enfermera, Annabel no terminaba de explicarse cómo una vacuna del calendario oficial estaba provocando tantos estragos en su hija. Los médicos y psicólogos “no encontraban nada” en el organismo de la chiquilla y terminaron achacando su malestar a un virus que ni siquiera fueron capaces de identificar. En marzo de 2014 empezaron los problemas para caminar y poco después Érika se quedó parada en una silla de ruedas.
El Dr. Carlos Álvarez-Dardet, catedrático de la Salud Púbica de la Universidad de Alicante, uno de los pocos profesionales valientes que lo saben y dan la cara, abandera la causa contra los estragos de la vacuna del papiloma humano, que se comercializa en España con los nombres Cervarix y Gardasil. Una vacuna “inútil, innecesaria y peligrosa”. Un crimen más a sumar a la larga lista que acarrea la mafiosa industria farmacéutica en connivencia con muchos de nuestras instituciones públicas.
Artículo original:
LA VACUNA DEL PAPILOMA: ÉRIKA, GIMMASTA CAMPEONA ACABA EN SILLA DE RUEDAS